Trabajo de Procesos ofrece un modelo no patologizador para entender y trabajar con todo el rango de experiencias humanas. Existe un continuo que une los estados ordinarios de consciencia (aquellos considerados normales por una cultura concreta y en un momento histórico) con los estados alterados y extremos (aquellos que nos resultan más desconocidos y que pueden llevar a una persona a ser psiquiatrizada o encarcelada). Trabajo de Procesos ha desarrollado métodos para trabajar con estos estados, incluyendo adicciones, coma, experiencias cercanas a la muerte y diagnósticos psiquiátricos. El enfoque de la Democracia Profunda valora y apoya tanto las experiencia “ordinarias” como “extremas” de la persona. El objetivo es incrementar la capacidad del individuo de moverse con libertad y consciencia a través del continuo de su experiencia.

Además, Trabajo de Procesos ve los estados alterados desde una perspectiva tanto individual (como una experiencia que trae algún mensaje o esencia útil para la persona) como cultural (pues los estados alterados suelen expresar las partes más marginalizadas e invisibilizadas del sistema de creencias de una sociedad o familia), y por tanto considera que es un trabajo a realizar no solo a nivel individual, si no también en relación con el mundo.

Puedes encontrar más información en los libros City Shadows: Psychological Interventions in Psychiatry, Coma: the Dreambody near Death y El Cuerpo del Chamán de Arnold Mindell; Coma: a Healing Journey de Amy Mindell; y Outside Mental Health. Voices and Visions of Madness y Discontinuación del Uso de Drogas Psiquiátricas: Una Guía Basada en la Reducción del Daño de Will Hall.

“Quizás las personas con experiencias de estados extremos sean potenciales chamanes, capaces de unir mundos. Es importante que todas las personas saquen a la luz y vivan experiencias marginalizadas, al menos un poquito. […] necesitamos a todas las personas, toda nuestra diversidad para llegar a donde estamos yendo como planeta. […] Prueba todos los mundos. Todos los caminos.”

Arnold Mindell (2013) The Dance of the Ancient One